La AEMPS ha elaborado, conjuntamente con los laboratorios comercializadores de las diferentes fluoroquinolonas (ciprofloxacino, delafloxacino, levofloxacino, moxifloxacino, norfloxacino y ofloxacino), han publicado una comunicación dirigida a los profesionales sanitarios en la que recuerdan las recomendaciones y restricciones de uso de estos medicamentos en relación con los efectos adversos graves que se han descrito asociados a su uso. También se pone de manifiesto que datos de estudios recientes sugieren que las fluoroquinolonas se siguen prescribiendo fuera de los usos recomendados.
En 2018, el EMA publicó una serie de recomendaciones de restricción del uso de fluoroquinolonas sistémicas e inhaladas, tras una revisión a nivel de la UE realizada el mismo año, para evaluar el riesgo de reacciones adversas graves y de duración prolongada (de meses o años), incapacitantes y potencialmente irreversibles que afectan principalmente a los sistemas músculo-esquelético y nervioso. Como consecuencia de la revisión realizada por el EMA, el uso de medicamentos con fluoroquinolonas se restringió significativamente en 2019.
Estas reacciones adversas graves pueden incluir tendinitis, rotura de tendones, artralgia, dolor en las extremidades, alteraciones de la marcha, neuropatías asociadas a parestesias, depresión, fatiga, deterioro de la memoria, alucinaciones, psicosis, trastornos del sueño y alteraciones de los sentidos (oído, visión, gusto y olfato). Pueden producirse daños en los tendones (especialmente en el tendón de Aquiles) en las 48 horas siguientes al inicio del tratamiento o pueden aparecer varios meses después de la interrupción del tratamiento.
Los resultados de un análisis promovido por la EMA (encepp.eu)), sobre las tasas de prescripción de fluoroquinolonas en 6 bases de datos sanitarias europeas (Bélgica, Francia, Alemania, Países Bajos, España y Reino Unido) sugieren que las fluoroquinolonas se pueden seguir utilizando fuera de las indicaciones autorizadas. Sin embargo, debido a las limitaciones del estudio, no se pueden extraer conclusiones definitivas.
Se recuerda a los profesionales sanitarios que informen a los pacientes del riesgo de estas reacciones adversas graves. Es necesario tener especial precaución en pacientes que reciben tratamiento concomitante con corticosteroides, personas de edad avanzada, pacientes con insuficiencia renal y pacientes que han sido sometidos a trasplantes de órganos sólidos, ya que el riesgo de sufrir tendinitis y rotura de tendones inducida por fluoroquinolonas puede verse aumentado en estos pacientes.