En un estudio de cohortes de base poblacional, a partir de una base de datos de atención primaria inglesa, se analizó la posible asociación entre el uso de inhibidores de la dipeptidilpeptidasa 4 (DPP-4) y un aumento del riesgo de colangiocarcinoma en pacientes adultos con diabetes de tipo 2.
Se identificaron cerca de 155.000 adultos de 40 años o más que habían iniciado tratamiento con un fármaco para la diabetes entre 2007 y 2017. Se excluyeron los pacientes con factores de riesgo conocido de colangiocarcinoma. Los resultados mostraron un aumento de este riesgo para los inhibidores de la DPP-4 y posiblemente para los agonistas del receptor del GLP-1. A pesar de que el riesgo absoluto es bajo, el colangiocarcinoma tiene una elevada tasa de mortalidad, y habría que confirmar estos hallazgos.