Los resultados del ensayo clínico fase III Phoenix, impulsado por el laboratorio Amyliyx para evaluar la capacidad del fármaco Albrioza (AMX0035) de ralentizar la evolución de la ELA no han sido positivos, según ha anunciado en un comunicado la compañía.
Esto supondrá que el laboratorio no pedirá la autorización de Albrioza a la Agencia Europea del Medicamento (EMA). El fármaco se comercializa en Canadá y Estados Unidos desde hace unos meses.
Según indican Justin Klee y Joshua Cohen, codirectores ejecutivos de Amylyx, en un comunicado, «estamos sorprendidos y profundamente decepcionados por los resultados de Phoenix tras los datos positivos del ensayo Centaur. Nuestra principal prioridad en este momento es compartir la información con las personas que sufren ELA y sus médicos, esto forma parte de nuestro compromiso continuo con ellos y con nuestra misión”.
El equipo del laboratorio agradece la dedicación de los participantes en el ensayo, los investigadores y equipos de los centros de estudio y añade que “con los datos recogidos de 664 participantes, estamos seguros de que habrá aprendizajes importantes que ayudarán a la investigación futura de la ELA”.
Los pacientes participantes proceden de 69 centros de Europa y EE.UU. En España, fueron cinco los hospitales que formaron parte de este ensayo: el Hospital de Bellvitge; el Hospital Universitario de Donostia; el Hospital Universitario y Politécnico La Fe (Valencia); el Hospital San Rafael (Madrid) y el Hospital del Mar (Barcelona).
Podéis ver aquí el comunicado íntegro de Amyliyx
En opinión de la Dra. Mònica Povedano, jefe de la Unidad Funcional de Enfermedad de Motoneurona del Servicio de Neurología del Hospital de Bellvitge (HUB), “esto nos muestra que en enfermedades como la ELA necesitamos ensayos de un plazo más largo de tiempo, porque es entonces cuando podemos ver un impacto en la progresión de la enfermedad”.
Destaca, además, “que el futuro no debe ser decepcionante, sino esperanzador, debemos recopilar toda la información que nos han aportado los ensayos fallidos de estos dos últimos años y ver dónde están los errores, si en las dianas terapéuticas, si debemos utilizar más de una, o en la estratificación de los pacientes, porque no dividimos o aplicamos el tratamiento idóneo para cada paciente”.
La Dra. Povedano considera que hay que reforzar aún más el trabajo de plataformas de investigación como Precission ALS, en las que participa el HUB, “porque son plataformas de manejo de datos, no sólo clínicas, sino también de biomarcadores y pruebas de imagen, lo que nos permitirá conocer mejor los subtipos de paciente y la progresión de la enfermedad y entonces podremos estratificar y personalizar”.